Nosotros
Fundada en 1996, Hidroeléctrica Boliviana S.A. (HB) es una empresa 100% boliviana y privada, creada con el objetivo, mediante el aprovechamiento de recursos renovables, de fortalecer la oferta de energía eléctrica en el Sistema Interconectado Nacional (SIN), que enlaza a ocho de los nueve departamentos de Bolivia. Este objetivo se plasma mediante la implementación del Complejo Hidroeléctrico del Río Taquesi, desarrollado y construido entre 1998 y 2002 y en operación desde el 19 de junio de 2002.
La empresa no surgió del proceso de “capitalización”, por el que se dispuso a favor de otros agentes, los otrora activos estratégicos del Estado en el sector, recuperados para el patrimonio nacional en la década del 2000, sino que nació de la visión de un grupo de emprendedores seducidos por la prodigalidad de los Yungas y el deseo de contribuir al desarrollo sostenible del país, para lo que se propusieron el uso de recursos naturales renovables en lugar de los abundantes pero no renovables y más contaminantes recursos hidrocarburíferos del Este y el Sur de Bolivia. Esos emprendedores nacionales formaron HB en 1996 para desarrollar el que fuera el Proyecto de Aprovechamiento Hidroeléctrico del Río Taquesi y sus Afluentes, en el municipio de Yanacachi, Provincia Sud Yungas del Departamento de La Paz. Posteriormente, se sumó al esfuerzo la norteamericana TENASKA INT. LLC., que adquirió la mayoría del paquete accionario de HB. Una vez obtenido el título habilitante de la entonces Superintendencia de Electricidad, hoy Autoridad de Fiscalización de Electricidad y Energía Nuclear, HB procedió al desarrollo y la construcción del Complejo Hidroeléctrico del Río Taquesi.
El Aprovechamiento Hidroeléctrico del Río Taquesi fue concebido y ejecutado en dos fases. La primera consistió en la adecuación y operación de una planta hidroeléctrica del tipo paso de agua construida a principios del siglo XX para alimentar de electricidad a la mina Chojlla, en que se explota aún tungsteno y estaño. El enlace de esta planta al SIN se verificó en 1998, inyectando su producción a dicho sistema hasta el año 2018 en que concluyó su vida operativa. La Segunda Fase del proyecto consistió en la construcción de dos nuevas plantas de generación de electricidad, del tipo paso de agua con capacidad de regulación hidráulica diaria. Esta Segunda Fase se inició en 1998 mediante la suscripción de un contrato llave en mano del tipo EPC (siglas en inglés de Ingeniería, Suministro y Construcción) firmado con el consorcio Black & Veatch / Colenco, de EUA y Suiza, respectivamente. Desde el 19 de Junio de 2002, las plantas de Chojlla y Yanacachi Norte se hallan en Operación Comercial, inyectando la totalidad de su producción al SIN. Los casi 90 [MW] de capacidad instalada con que cuentan las plantas de HB fueron en su momento el emprendimiento hidroeléctrico más grande desarrollado en una sola oportunidad en toda la historia del sector en Bolivia.
El proyecto fue financiado completamente con recursos del sector privado. Aparte del capital aportado por los socios, en una primera etapa, el financiamiento fue adquirido mediante la emisión de Bonos de Deuda de Largo Plazo que fueron colocados a través de la Bolsa Boliviana de Valores (BBV), en la que fue la mayor operación de emisión de bonos en la historia de Bolivia para un proyecto garantizado con sus propios flujos de efectivo futuros. En una segunda etapa, este financiamiento obtenido mediante la emisión de Bonos, fue reemplazado por uno proveniente de una Titularización, también realizada a través de la BBV, que a su tiempo fue redimida con fondos provenientes de un préstamo bancario.